El viernes fué un día especial...tras una semana larga, llena de actividad y trabajo me apetecía pasear por la ruta 66...si amigos, la noche olía a rock and roll...Cristofe vino a buscarme en su descapotable y recorrimos las calles de una Zaragoza calurosa y atravesada por carriles de tranvías gratuitos. La primera parada fué nostalgica...pasamos por lo que fué el querido "Cantor del jazz" transformado ahora en un local de música tropical...tiene gracia...nada que ver a ese club que conocí en el 2002 precisamente en un concierto en solitario de Cristian y donde disfruté después de una velada de jazz inolvidable a cargo del "Maestro"....
La segunda parada fué necesaria....EL Timple y sus camperos...
La tercera parada..fué la mejor...la sala "Morrisey" abría sus puertas para nosotros y para disfrutar de un concierto mágico, el gran Jesus Viñas nos regaló una velada sensacional.
Cantó de todo y todo bien, versiones en todos los idiomas, estilos diferentes, se rodeó de amigos músicos y tuvo el detalle de llevarnos a Cristian y a mi al escenario para interpretar "El Rey de la ciudad"...
El concierto terminó tarde pero la noche todavía era joven, asi que decidimos apurar la última copa con más música...pero esa es otra historia..
LLegó la noche del sábado...
Cansado, pero con más ganas de rock and roll quedé con Raúl en el "Rioja", ese bar de siempre y que servía de antesala a los ensayos imposibles de "Infernos House" de mediados de la década pasada... la primera parada...
La segunda parada era necesaria...EL Timple y sus camperos...
Y la tercera parada fué muy familiar..volvía a la sala "Morrisey" en esta ocasión para ver actuar a mi "partenaire" de la noche anterior, el gran Cristian Baquero.
Cuando Raúl y yo entramos en la Sala empezamos a encontarnos con amigos con lo que compartimos cervezas, risas y algún que otro recuerdo...
El show empezó tarde,(como debe ser), el ambiente era perfecto para este tipo de conciertos en los que Cristian se encuentra como pez en el agua.
Se repitió el guión del viernes en el concierto de Jesús y sonaron versiones, clásicos de siempre en la discografia de Cristian, temas más nuevos y subieron amigos a tocar y cantar con él...con
una buena representación bandambariana a cargo de un servidor interpretando "Dile al tiempo" Rafa y Raúl con"El barrio del dolor" y para cerrar el concierto "Viejo blues" con la colaboración de Jorge Bermejo (en la guitarra) y Julio Bona(al saxo).
Y aunque no se lo crean, volvió a sonar "El Rey de la ciudad"...como hubiera sonado si en el año 1997, los Trinos hubieramos llegado a tocar en la "Morrisey"(como ya conté la semana pasada), asi que se puede decir que saldamos la deuda...
Tras el concierto, nos encaminamos para cerrar la noche hacia bares de nombres prohibidos y donde no existe la ley...(antitabaco)
Y poco más que contar...dos noches para recordar, dos noches en la Morrisey, dos noches con dos grandes artistas...
